ohh populum...!

Elecciones o... Erecciones

Es de suponer que la primera acción a tomar por los candidatos y el comité encargado de preparar el asalto al poder es la relación de promesas que harán al respetable, promesas de las que ellos son los primeros convencidos no se van a cumplir o si algunas llegan a buen término serán dos días antes de acabar el mandato, despilfarrando lo que haya que despilfarrar ... y quedando el entuerto financiero a los candidatos de las próximas elecciones.

Se afinan las estrategias para tergiversar los temas, los datos y lo que haga falta... ¡ Al enemigo ni agua... !

Los partidos de menor cuantía, conscientes ellos de que no van a tener responsabilidades, sabiendo de antemano que están en la contienda solo para hacer ruido de fondo y pillar alguna que otra concejalía o algún cargo electo (y por tanto unos duritos al final de mes), prometen lo que no está escrito y arremeten contra todo lo arremetible, que es en cierta forma lo único que les queda: prometer todo lo prometible, por utópico que sea por si "pica" algún pardillo, le vota... y poco más.

Los discurso de unos y otros tan definidos como sus candidatos, todo muy previsible: unos los salientes del gobierno loando sus logros presentándose como los salvadores de la patria, los que van a liquidar el paro y a todo lo que se mueve, los de la oposición... pues eso, lo esperado... que los otros han arruinado al pais, que no ha arreglado nada sino todo lo contrario, que dimita el Sr. Presidente de la Junta y de la Unida... y que (¡... por si alguien lo dudaba...!) ellos son la solución para todos los desgraciados y agraciados del país y de sus alrededores...

Uno ofrecerá dos y el otro duplicará el envite, uno le echará por cara la corrupción y el otro lo mismo pero al revés... Nada nuevo en el horizonte, todos y cada uno con la cantinela que le es peculiar... Objetivo: Atraer a cuanto mas incautos mejor a que le depositen su voto

La cuestión a dilucidar, a debatir y encontrar una explicación razonable es por que allí donde los inclicitos aparecen, llenan la sala, el salón de acto, el teatro, el anfiteatro e incluso el patio de butacas, si antes de entrar en el recinto ferial y de que los candidatos tomen el micro, la plebe sabe con precisión suiza (aunque simula ignorarlo...) la filípica que les van a soltar, lo que se va a encontrar... lo típico de la vez anterior: muchas banderitas, música triunfalista, las huestes, esas que sí o sí les van a votar, enfervorecidas, sacando los pañuelos y pidiendo a gritos las orejas y el rabo del contrincantes, presas algunos de una excitación momentánea, que mas que unas elecciones lo que les va a producir es una erección de caballo en celo que...

El escenario al mas puro estilo "american life", los protagonista sobre el escenario, todos en medio, con las manitas entrelazadas levantadas al aire en señal del triunfo, de euforia (o simulacro) de euforia colectiva... y así hasta el próximo Meeting en que se repite historia, propósitos y puesta en escena.

Eso si la TV, la radio, los periódicos todos atentos al menor gesto, al mas mínimo movimiento... que en las horas siguientes en cada rincón de la Nación, en las pantallas con muchas y pocos pulgadas echando humo a costa de las noticias insulsas y previsibles de tales eventos, repetirán hasta la saciedad, sin añadir nada que no sea conocido... Lo mismo que las noticias deportivas en vísperas de un partido de futbol... todo muy previsible, todo lo mismo que hace unos años ...

Al final y como de costumbre serán unos cuantos, posiblemente incluso esos que ni asisten a tales eventos, los que decidirán quién es quién y quien se sube a la poltrona...

Despues del acto cada cual a su casita o a la tasca de al lado como si tal cosa, como si no hubiese pasado nada... que es rigurosamente cierto puesto que en realidad no ha pasado nada aparte del circo montado con toda la parafernalia propia del evento.

Lo triste del caso son los millones y millones que se despilfarran en tales campañas que poco o nada nuevo aportan sobre las intenciones, las promesas y las críticas de unos y otros...

¡Todo muy previsible, todo muy caro... y todo para que...!